sábado, 20 de octubre de 2012

El viaje

De un neurótico volcán nos descolgamos
por laderas de orquídeas y quetzales
a las tierras australes de tu sangre
donde el cielo se funde con el río…
para echar este milagro hacia los vientos
y apretar el abrazo en la distancia…
para andar las huellas de los tuyos
y acercar los pasos de los míos…

Los amigos fueron puente y lo cruzamos
hacia un sol destellando primaveras.
Añorando los sonidos de la selva
la memoria a cinco voces nos dio abrigo.
Y empezamos a soñar con este día,
el primero de esta vida que te entrego,
el primero de esta historia que contamos,
el primero de este viaje que emprendimos.  

Será al fin que te nombré mi territorio
y tu amor lo habita soberano.
Al despertar los amaneceres eternos
recordaré por qué nos elegimos.
Cada día me buscaré en tus brazos
y en tu sonrisa de pan de la mañana.
Tu corazón de fuego será mi lumbre…
en mi melena de noche harás tu nido.